RESUMEN
Introducción: los estilos de aprendizaje son rasgos del estudiante que pueden ayudar a la planificación curricular en educación médica. No se conoce con certeza si algún estilo de aprendizaje específico se relaciona con la satisfacción en educación médica continuada o si aumenta las probabilidades de acceder a una residencia médica. Objetivo: este trabajo buscó categorizar los estilos de aprendizaje en una cohorte de médicos, describir su satisfacción según cada estilo de aprendizaje y el acceso a una residencia médica. Materiales y métodos: estudio de corte transversal en médicos cursando un diplomado de actualización médica. Se categorizaron estilos de aprendizaje y sus combinaciones (activo, reflexivo, teórico y pragmático). Se calculó la diferencia de medias de satisfacción del curso. Posteriormente, se evaluó la asociación entre el estilo de aprendizaje y el acceso a un cupo de residencia médica. Resultados: trescientos once médicos (n=311) aceptaron participar. El 75 % tenían entre uno y dos estilos dominantes, siendo el más frecuente el reflexivo/teórico (n=108; 34,7%). No se encontró una mayor satisfacción global asociada a un estilo en particular. Conclusión: el estilo de aprendizaje dominante es el reflexivo/teórico. La satisfacción global es mayor en la modalidad bimodal. No se encontró asociación con ningún estilo de aprendizaje y el acceso a residencia médica.
Introduction: learning styles are student traits that can aid in curriculum planning in medical education. It is not known for certain if any specific learning style is related to satisfaction in continuing medical education or if it increases the chances of accessing a medical residency. Objective: the learning styles are student traits that can aid in curriculum planning in medical education. This study aimed to categorize learning styles within a cohort of physicians, describe their satisfaction according to each learning style, and assess access to a medical residency program. Methods: a cross-sectional study was conducted with physicians attending a diploma in clinical and surgical areas. Learning styles were categorized according to the CAMEA40 questionnaire. The median differences of course satisfaction was calculated. Subsequently, the association between each learning styles and access to a medical residency post was evaluated. Results: three hundred eleven (n = 311) agreed to participate. A total of 75 % had between one and two dominant learning style, the most frequent being the reflective/theoretical (n = 108; 34,7 %). No greater overall satisfaction associated with a particular learning style was found. Conclusion: one-third of the doctors had a reflective/theoretical profile. The overall satisfaction and access to a medical residency were no associated with any learning style.