RESUMEN
Objetivo: Evaluar el impacto de un curso de anastomosis intestinal abierta simulada en residentes de cirugía general. Materiales y Métodos: Estudio prospectivo no aleatorizado. Se aplicó un curso para residentes del programa de cirugía general del Hospital Clínico Universidad de Chile en 2021 en su primera versión y una segunda vez en 2022. Se evaluó la percepción y confianza con encuestas pre y post curso. Resultados: Participaron diecisiete residentes. De ellos, 16 residentes habían asistido previamente en la técnica básica, 10 nunca habían realizado una anastomosis intestinal a un paciente real como primer cirujano, en su mayoría residentes de segundo y tercer año. El nivel de confianza promedio para realizar una anastomosis intestinal en pacientes previo al curso fue de 1,86/7, 3/7 y 5,38/7 para el primer, segundo y tercer año, respectivamente. De manera global, previo al curso, los residentes promediaron una confianza de 3,09/7. Después del curso, 15/16 residentes estuvieron de acuerdo o muy de acuerdo en que mejoró la confianza en la técnica; que el modelo representa correctamente la situación real, y que los modelos simulados son más efectivos para el aprendizaje que la experiencia clínica por sí sola. Los residentes aumentaron su confianza en 2,47 puntos, alcanzando un promedio de 5,56/7 para la técnica (p = 0,001). Conclusiones: El curso de anastomosis intestinal abierta es percibido por los residentes como efectivo, realista y aumenta, significativamente, la confianza en la realización de esta técnica.
Objective: To evaluate the impact of a simulated open intestinal anastomosis course on general surgery residents. Materials and Methods: Prospective non-randomized study. A course was applied to residents in the general surgery program at the Clinical Hospital of the University of Chile in 2021 for its first version and a second time in 2022. Perception and confidence were evaluated with pre-and post-course surveys. Results: Seventeen residents participated. Of these, 16 residents had previously attended the basic technique, 10 had never performed an intestinal anastomosis as a first surgeon on a real patient, mostly second and third-year residents. The average confidence level for performing an intestinal anastomosis on patients prior to the course was 1.86/7, 3/7, and 5.38/7 for the first, second, and third year, respectively. Overall, prior to the course, residents averaged a confidence of 3.09/7. After the course, 15/16 residents agreed or strongly agreed that it improved their confidence in the technique; that the model accurately represents the real situation, and that simulated models are more effective for learning than clinical experience alone. Residents increased their confidence by 2.47 points, reaching an average of 5.56/7 for the technique (p = 0.001). Conclusions: The open intestinal anastomosis course is perceived by residents as effective, realistic, and significantly increases confidence in performing this technique.