RESUMEN
Las malformaciones congénitas pueden acarrear problemas emocionales tanto para la familia como para el paciente que tiene algún tipo de malformación congénita craneofacial, debido a factores psicosociales que intervienen en el afrontamiento de dicha patología, pues el nacimiento de un hijo con malformación implica para los padres y familiares cuidados especiales, interrogantes acerca del futuro, incertidumbre en cuanto a lo relacional y todo aquello que pueda generar frustración al paciente y a la familia. Así es importante poder acompañar el proceso de manera interdisciplinar, el rol del psicólogo es guiar al paciente y a su familia para afrontar y comprender que pasa y así lograr una exitosa rehabilitación y adaptación.
Asunto(s)
Humanos , Masculino , Niño , Craneosinostosis/psicología , Anomalías Craneofaciales , Disostosis CraneofacialRESUMEN
Las malformaciones congénitas pueden acarrear problemas emocionales tanto para la familia como para el paciente que tiene algún tipo de malformación congénita craneofacial, debido a factores psicosociales que intervienen en el afrontamiento de dicha patología, pues el nacimiento de un hijo con malformación implica para los padres y familiares cuidados especiales, interrogantes acerca del futuro, incertidumbre en cuanto a lo relacional y todo aquello que pueda generar frustración al paciente y a la familia. Así que es importante poder acompañar el proceso interdisciplinar, el rol del psicólogo es guiar al paciente y a su familia para afrontar y comprender que pasa y así lograr una exitosa rehabilitación y adaptación.
Asunto(s)
Humanos , Niño , Microtia Congénita , Anomalías Craneofaciales , Microtia Congénita/diagnósticoRESUMEN
Las malformaciones congénitas pueden acarrear problemas emocionales tanto para la familia como para el paciente que tiene algún tipo de malformación congénita craneofacial, debido a factores psicosociales que intervienen en el afrontamiento de dicha patología, pues el nacimiento de un hijo con malformación implica para los padres y familiares cuidados especiales, interrogantes acerca del futuro, incertidumbre en cuanto a lo relacional y todo aquello que pueda generar frustración al paciente y a la familia. Así es importante poder acompañar el proceso de manera interdisciplinar, el rol del psicólogo es guiar al paciente y a su familia para afrontar y comprender que pasa y así lograr una exitosa rehabilitación y adaptación.