الملخص
ABSTRACT Introduction: Studies have shown that the frequency of acute kidney injury (AKI) increases in patients with COVID-19. Acute tubular necrosis has been reported to be the most common damage in these patients, probably due to impaired renal perfusion. On the other hand, different complex pathophysiological processes may be involved due to viral infection's direct effects on the renin-angiotensin-aldosterone system, the activation of coagulopathy, the cytokine storm, and the activation of the immune system. Many glomerular diseases may be seen in these patients, like anca-associated vasculitis, membranous glomerulonephritis, and IgA nephropathy. Clinical case: We present a newly diagnosed crescentic IgA nephropathy (IgAN) case after a SARS-CoV-2 infection and vaccination. A 31-year-old man with no medical history presented with gross hematuria 24 hours after SARS-CoV-2 infection. Hematuria regressed spontaneously within three days. He was vaccinated with two doses of CoronaVac (Sinovac) three months after he had been infected by SARS-CoV-2. Then he was vaccinated with the Pfizer-BioNTech COVID-19 vaccine one month after the second dose of CoronaVac (Sinovac) vaccine. He presented with gross hematuria and subnephrotic proteinuria 24 hours after the first dose of the Pfizer-BioNTech COVID-19 vaccine. A kidney biopsy was performed and showed crescentic IgA nephropathy (IgAN). He was started on methylprednisolone and angiotensin receptor blocker. Patients who receive mRNA-based vaccines demonstrate robust antibody production against the receptor-binding domain (RBD) of the S1 protein. Similar to natural infection, due to the intense stimulation of immune response from mRNA-based vaccines compared to other vaccines, the patients may produce de novo antibodies, leading to IgA-containing immune-complex deposits. Conclusions: This case highlights the immunological effects of the novel mRNA-based SARS-CoV-2 vaccines. Nephrologists should be aware of new-onset hematuria or proteinuria after SARS-CoV-2 infection or mRNA-based SARS-CoV-2 vaccine.
RESUMEN Introducción: Los estudios han demostrado que la frecuencia de insuficiencia renal aguda (IRA) aumenta en pacientes con COVID-19. Se ha informado que la necrosis tubular aguda es el daño más común en estos pacientes, probablemente debido a la alteración de la perfusión renal. Por otro lado, pueden estar involucrados diferentes procesos fisiopatológicos complejos, debido a los efectos directos de la infección viral sobre el sistema renina-angiotensina-aldosterona, la activación de la coagulopatía, la tormenta de citoquinas y la activación del sistema inmunológico. En estos pacientes se pueden observar muchas enfermedades glomerulares, como vasculitis asociada a anca, glomerulonefritis membranosa y nefropatía por IgA. Caso clínico: Presentamos un caso de nefropatía IgA extracapilar (NIgA) de nuevo diagnóstico tras una infección por SARS-CoV-2 y vacunación. Un hombre de 31 años sin antecedentes médicos presentó hematuria macroscópica 24 horas después de la infección por SARS-CoV-2. La hematuria remitió espontáneamente en 3 días. Fue vacunado con dos dosis de CoronaVac (Sinovac) tres meses después de haber sido infectado por el SARS-CoV-2. Luego fue vacunado con la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19, un mes después de la segunda dosis de la vacuna CoronaVac (Sinovac). Presentó hematuria macroscópica y proteinuria no nefrótica 24 horas después de la primera dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19. Se realizó una biopsia renal que mostró NIgA extracapilar. Comenzó con metilprednisolona y bloqueador del receptor de angiotensina. Los pacientes que reciben vacunas basadas en ARNm demuestran anticuerpos contra el dominio de unión al receptor (RBD) de la proteína S1. De manera similar a la infección natural, debido a la fuerte estimulación de la respuesta inmunitaria de las vacunas basadas en ARNm en comparación con otras vacunas, los pacientes pueden producir anticuerpos de novo, lo que lleva a depósitos de complejos inmunitarios que contienen IgA. Conclusiones: Este caso destaca los efectos inmunológicos de las nuevas vacunas contra el SARS-CoV-2 basadas en ARNm. Los nefrólogos deben estar al tanto de la aparición de hematuria o proteinuria luego de la infección por SARS-CoV-2 o la vacuna contra el SARS CoV-2 basada en ARNm.