ABSTRACT
En un grupo de 96 niños (55 experimentales y 41 controles), desnutridos primarios de I y III grado, se estudiaron los efectos de la estimulación psicosensorial intensiva en la calidad de su ambiente familiar y en el desarrollo psicomotor. Los grupos fueron pareados por edad, sexo y peso de nacimiento. Todos los niños pertenecían a familias de extrema pobreza y permanecieron un año en el programa. El total de niños recibió la atención habitual que se proporciona a los desnutridos en el Consultorio de Nutrición Infantil de Hospital Sótero del Río, el grupo experimental recibió además un programa de estimulación psicosocial que contempla acciones educativas y de supervisión a las madres en sus hogares. La capacitación materna fue realizada por enfermeras profesionales. Se evaluó calidad del ambiente familiar (Inventario Home), al ingresar y egreso del niño al estudio y desarrollo psicomotor (escalas de Rodríguez S. y Brunet Lezine) alcanzado por el niño a los 0, 6 y 12 meses de aplicación del programa. En ambos grupos los parámetro evaluados evolucionaron positivamente siendo significativamente más altos (p < 0,01) en el grupo experimental. Se concluye que la recuperación significativamente mayor en el grupo experimental fue resultado de la aplicación del programa de estimulación implementado en el hogar