RESUMO
El maltrato infantil es definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como "el abuso y la desatención que sufren los niños menores de 18 años. Incluye todo tipo de maltrato físico y/o emocional [ ] que resulte en un daño real o potencial para la salud, la supervivencia, el desarrollo o la dignidad del niño". Al examinar los rastros corporales del maltrato físico, siguiendo los mecanismos de lesión más frecuentemente implicados, es posible detectar patrones radiológicos típicos. La evaluación imagenológica del hueso en reparación permite inferir cronologías para correlacionar con los datos obtenidos en la anamnesis. Los profesionales de la salud deben detectar oportunamente lesiones radiológicas sospechosas y activar de forma temprana el resguardo del menor. Nuestro propósito es realizar una revisión sobre las publicaciones recientes referidas al estudio imagenológico en niños de quienes se sospeche que puedan ser víctimas de violencia física.
The World Health Organization (WHO) defines child maltreatment as "the abuse and neglect that occurs to children under 18 years of age. It includes all types of physical and/or emotional ill-treatment [...], which results in actual or potential harm to the child's health, survival, development or dignity." By examining the bodily traces of physical abuse, following the most frequently involved mechanisms of injury, it is possible to identify typical radiological patterns. The imaging studies of the bone under repair allows inferring a timeline that may be correlated to the data obtained during history taking. Health care providers should detect suspicious radiological lesions in a timely manner and promptly activate the safeguarding of the child. Our objective was to review recent publications on the imaging studies of children suspected of being victims of physical violence.
Assuntos
Humanos , Pré-Escolar , Criança , Adolescente , Maus-Tratos Infantis/psicologia , Violência , RadiologistasRESUMO
El síndrome de Horner está caracterizado por la siguiente tríada de signos clínicos: miosis, ptosis y anhidrosis facial. A su vez, pueden aparecer heterocromía del iris, inyección conjuntival, eritema facial, mucosa nasal congestiva y enoftalmos aparente secundario a la disminución de la hendidura palpebral. Es causado por una interrupción de la vía simpática, que se extiende desde el hipotálamo hasta la órbita. Debido a que dicha vía no se decusa, los signos son homolaterales a la lesión de esta. Tradicionalmente, se lo clasifica en congénito y adquirido. En ocasiones, se asocia a neoplasias, como el neuroblastoma. Sigue siendo controversial qué estudios de imágenes se deberían solicitar en forma protocolizada frente a un paciente con este síndrome neurológico. Se presenta el caso de un lactante de 45 días de vida con síndrome de Horner congénito.
Horner syndrome is characterized by the following triad of clinical signs: miosis, ptosis and facial anhidrosis. In addition, iris heterochromia, conjunctival injection, facial erythema, congestive nasal mucosa and apparent enophthalmos secondary to the reduction of the palpebral fissure can appear. It is caused by an interruption of the sympathetic pathway that extends from the hypothalamus to the orbit. Because there is no decussation, the signs are homolateral to the lesion. Traditionally, it is classified as congenital and acquired. Occasionally, it is associated with neoplasias such as neuroblastoma. It remains controversial what imaging studies should be requested as a protocolized workup of this neurological syndrome in a patient. We report the case of a 45-day-old infant with congenital Horner syndrome.