Las
infecciones odontogénicas se originan de procesos infecciosos periapicales o periodontales, que al propagarse al tejido celular subcutáneo logran formar una
celulitis o un
absceso. En raras condiciones, pueden complicarse y comprometer el
estado general del
paciente. Los microorganismos frecuentemente asilados en este tipo de
infección son Streptococcus viridans,
Prevotella,
Porphyromonas y
Fusobacterium. Para el manejo de las
infecciones odontogénicas, se debe determinar la serveridad de la
infección, evaluar las defensas del huésped, eliminar la
causa con un
drenaje adecuado y administrar el
antibiótico adecuado. Entre los
antibióticos más utilizados se encuentran las
penicilinas,
cefalosporinas,
macrólidos, lincosaminas y
nitroimidazoles