ABSTRACT
Peri-urban forest monitoring requires indicators of vegetation damage. An example is the sacred fir (Abies religiosa) forests surrounding Mexico City, which have been heavily exposed to tropospheric ozone, a harmful pollutant, for over 4 decades. We developed a participatory monitoring system with which local community members and scientists generated data on ozone tree damage. Santa Rosa Xochiac rangers (13) used the digital tool KoboToolBox to record ozone damage to trees, tree height, tree ages, tree condition, tree position, and whether the tree had been planted. Thirty-five percent of the trees (n = 1765) had ozone damage. Younger trees had a lower percentage of foliage damaged by ozone than older trees (p < 0.0001), and asymptomatic trees tended to be younger (p < 0.0001). Symptomatic trees were taller than asymptomatic trees of the same age (R2 c = 0.43, R2 m = 0.27). Involving local communities facilitated forest monitoring and using digital technology improved data quality. This participatory system can be used to monitor forest condition change over time and thus aids restoration efforts driven by government or local communities' interests, facilitating local decision-making.
Evaluación del daño relacionado a la contaminación y del éxito de la restauración de los bosques urbanos con un monitoreo participativo y herramientas digitales Resumen El monitoreo de los bosques periurbanos requiere indicadores de daños en la vegetación. Un ejemplo son los bosques de abeto (Abies religiosa) que rodean la Ciudad de México, pues desde hace más de 4 décadas han estado expuestos al ozono troposférico, un contaminante nocivo. Desarrollamos un sistema de monitoreo participativo con el que miembros de la comunidad local y científicos generaron datos sobre los daños causados por el ozono en los árboles. Los guardabosques de Santa Rosa Xochiac (133) utilizaron la herramienta digital KoboToolBox para registrar los daños causados por el ozono en los árboles, su altura, edad, estado, posición y si eran árboles plantados. El 35% de los árboles (n = 1,765) presentó daños por ozono. Los árboles más jóvenes tenían un menor porcentaje de follaje dañado por el ozono que los árboles más viejos (p<0.0001), y los árboles asintomáticos tendían a ser más jóvenes (p<0.0001). Los árboles sintomáticos eran más altos que los asintomáticos de la misma edad (R2 c = 0.43, R2 m = 0.27). La participación de las comunidades locales facilitó el monitoreo forestal y el uso de tecnología digital mejoró la calidad de los datos. Este sistema participativo puede utilizarse para monitorear los cambios en el estado de los bosques a lo largo del tiempo y contribuir a los esfuerzos de restauración impulsados por el gobierno o las comunidades locales, facilitando la toma de decisiones a nivel local.