ABSTRACT
Hymenoptera venom immunotherapy (HVI) is a long-term effective treatment to avoid new systemic reactions in patients with Hymenoptera allergy. The sting challenge test is considered the gold standard to confirm the tolerance. However, the use of this technique is not generalized in clinical practice, being the basophil activation test (BAT), which functionally explores allergen response, an alternative that does not entail any of the provocation risks associated with the sting challenge test. This study reviews the publications that used the BAT to follow up and evaluate the success of the HVI. Studies assessing the changes between a baseline BAT before the start and BATs performed between the starting and maintenance phases of the HVI were selected. Ten articles were found, comprising information from 167 patients, of which 29% used the sting challenge test. The studies concluded the importance of evaluating the responses with submaximal allergen concentrations, which reflect basophil sensitivity, to monitor the HVI using the BAT. It was also observed that changes in the maximum response (reactivity) could not reflect the clinical status of tolerance, particularly in the initial phases of HVI.
La inmunoterapia con veneno de himenópteros (IVH) es, a largo plazo, un tratamiento eficaz para evitar nuevas reacciones sistémicas en pacientes con alergia a este tipo de insectos. La prueba de repicadura controlada es el estudio de referencia para confirmar la tolerancia del individuo. Sin embargo, no se ha generalizado su indicación clínica, por lo que la prueba de activación de basófilos (TAB) resulta una buena alternativa, pues valora de manera funcional la respuesta al alérgeno y está exenta de los riesgos asociados con la provocación. En esta revisión se explora la utilidad de la TAB en el seguimiento y valoración del éxito de la IVH. Se seleccionaron estudios que evalúan los cambios entre una TAB basal y en otro momento de la fase de inicio o mantenimiento de la IVH. Se incluyeron 10 estudios con datos de 167 pacientes, de los que el 29% había tenido prueba de repicadura controlada. Para vigilar la eficacia de la IVH debe explorarse la respuesta del basófilo, con la determinación de las concentraciones submáximas del alérgeno, que reflejan la sensibilidad del basófilo. Los cambios en la respuesta máxima (reactividad) no pueden aportar información del estado de tolerancia, especialmente en las fases iniciales de la IVH.
Subject(s)
Basophil Degranulation Test , Desensitization, Immunologic , Humans , Follow-Up Studies , Basophils , Immune ToleranceABSTRACT
BACKGROUND: The cyclooxygenase-2 inhibitors are usually recommended as a safe alternative in patients with multiple hypersensitivity to non-steroidal antiinflammatory drugs. Nevertheless, both immediate and delayed hypersensitivity reactions have been described, and the possibility of cross-reactivity with sulphonamides. CASE REPORT: A 66-year-old patient who, after taking a celecoxib tablet, presented with latency of several hours a skin reaction. Previously, he had presented a minor reaction during treatment with etoricoxib without establishing the correlation at that time. The patient underwent an allergological study by means of skin tests with negative results and an oral challenged test with etoricoxib with positive results. Tolerance to sulfonamides was proven. CONCLUSIONS: We present a singular case of a cross-reactivity skin reaction to etoricoxib and celecoxib, suggesting the need to perform challenge tests to confirm the tolerance or not of each drug before allowing their use. On the contrary, trimethropim/sulfamethoxazole could be safely used in our patients, if needed.
INTRODUCCIÓN: Los inhibidores de la ciclooxigenasa-2 suelen indicarse en pacientes con hipersensibilidad múltiple a los antiinflamatorios no esteroides. Sin embargo, se han descrito reacciones de hipersensibilidad inmediata y retardada, además de posible reactividad cruzada con sulfonamidas. REPORTE DE CASO: Paciente masculino de 66 años, que acudió al servicio de Alergia por una reacción cutánea, luego de haber consumido un comprimido de celecoxib. Previamente, durante el tratamiento con etoricoxib, tuvo una reacción menor, sin establecer la correlación farmacológica. Se realizaron pruebas cutáneas (intraepidérmicas y epicutáneas), con resultados negativos, y un examen de exposición oral controlada con etoricoxib, con resultado positivo. Se comprobó la tolerancia a las sulfamidas. CONCLUSIONES: El caso de reacción cutánea, mediante reactividad cruzada, entre etoricoxib y celecoxib expuesto en este artículo sugiere la necesidad de realizar pruebas de provocación para confirmar la tolerancia de cada fármaco antes de su prescripción. Por el contrario, trimetropim-sulfametoxazol pueden indicarse con seguridad, si fuese necesario.