RESUMEN
La hidrocefalia afecta a 0,3 a 5 de cada 1000 nacidos vivos y tiene como origen múltiples causas. Todas ellas tienen como posible tratamiento la realización de una derivación ventriculoperitoneal (DVP). Dicho procedimiento se asocia a un riesgo de infección tan variable como de 4,5 a 40 por ciento por paciente, según las distintas series. La infección del sistema bajo la forma de ventriculitis exige un adecuado tratamiento a fin de disminuir la morbimortalidad y los tiempos de internación. Como parte del tratamiento de la misma, se debe retirar la DVP y colocar una derivación externa o ventriculostomía. En el siguiente artículo se describe el manejo básico de la ventriculostomía a fin de evitar complicaciones por manipulación inadecuada de la misma.