La reforma del sector salud adoptada en Colombia en 1993, implicó cambios institucionales de importancia; abrió la competencia en el aseguramiento; promovió entre los consumidores la libre elección de la entidad aseguradora y el prestador de servicios; buscó la adopción de un plan único de servicios para toda la población y propició mecanismos de contratación entre aseguradores y prestadores para la provisión de dicho plan. Al cumplirse la primera década de haber adoptado el Sistema General de Seguridad Social en Salud, siguiendo una perspectiva económica se observan varias lecciones que sirven para adelantar ajustes sobre el mismo y orientar reformas en otros países.