RESUMO
Numerosos recetarios de época bajomedieval y moderna contienen información sobre tratamientos destinados al cuidado del cuerpo, en especial del cabello, la piel o la dentadura. Se trata de textos misceláneos, donde los contenidos de medicina se mezclan con los de dietética, salud y belleza, motivo por el que en ocasiones han sido llamados libros de mujeres, debido a su vinculación con costumbres del grupo femenino. Tales textos incluyen indicaciones para la preparación de compuestos destinados a la limpieza de dientes y a combatir el mal aliento, recetas que incorporan materias antisépticas y de efecto bactericida disueltas en agua, o usadas en forma sólida para frotar directamente las encías, como dentífricos con que cepillar los dientes y la lengua. También compuestos destinados a encarnar las encías y a prevenir sus enfermedades, o a calzar los dientes débiles y faltos de raíz. Y detallan la forma de aplicación de dichos polvos y letuarios, que suele efectuarse frotando los dientes o mediante enjuague bucal. El artículo estudia estas recetas y analiza tanto las propiedades de las materias que las integran como los procedimientos seguidos para su aplicación. (AU)