RESUMO
El paciente consultó solicitando autorización para cambio de sexo, porque se sentía mujer. Vivía su corporalidad, el erotismo, la sexualidad, la vestimenta y la familia, como mujer. Sintiendo que sus órganos sexuales masculinos no le pertenecían, los rechazaba. Su expresividad era femenina y su comportamiento fue concordante con su vivenciar. Durante años usó hormonas para feminizarse y estableció una relación de pareja duradera, viviendo como mujer. Después de un estudio acusioso, se autoriza el cambio de sexo al diagnosticarse Transexualismo Primario. En control realizado siete años después, encontramos que ha vivido contenta, después de haberse casado por el Registro Civil e Iglesia con el antiguo conviviente. Progresó en su ocupación, en lo económico y mantuvo buenas relaciones en su grupo social. Se plantean algunas consideraciones acerca de si se trata de un enfermo o de un anormal, de las hipótesis que pudieran explicar su cuadro, del diagnóstico diferencial con el homosexualismo y transvestismo y de la indicación quirúrgica